Junto con el casco uno de los elementos de seguridad más importantes en la práctica del ciclismo es el uso de unas gafas adecuadas, ya que estas protegen una de las zonas más sensibles de nuestro cuerpo, los ojos.
Las gafas de ciclismo adquieren dos variantes de protección:
En primer lugar protegen nuestros ojos de cuerpos extraños que puedan acabar en el interior de los ojos como consecuencia de la velocidad, como pueden ser insectos o pequeñas piedras que puedan saltar, creando así una situación de descontrol que se puede volver realmente peligrosa si se produce circulando a una velocidad elevada. Además, también nos protegen del viento y de la sensación de sequedad ocular que este produce.
La segunda de las variantes viene dada por los constantes cambios de luminosidad que se pueden producir durante una ruta, ya que dependiendo de la zona por la que se transite se pueden producir cambios bruscos y constantes de luz que sobre todo en montaña pueden llevar a una mala lectura del suelo por el que se transita, llevando a una mala trazada o incorrecta velocidad que como desenlace puede tener una caída. Además de la necesaria protección ante los rayos nocivos del sol.
¿Qué gafas de ciclismo elijo?
Los principales puntos que se deben tener en cuenta a la hora de elegir unas gafas de sol para montar en bicicleta son los que a continuación se enumeran:
– En primer lugar deben ser unas gafas que hayan obtenido la certificación de protección contra los rayos ultravioleta, la cual se podrá observar en una pequeña pegatina puesta en el cristal de las gafas, en la caja o en las características de estas. No debemos fiarnos de las lentes que no tengan este certificado, el uso de lentes que no hayan pasado los controles pertinentes es altamente perjudicial para nuestros ojos y nuestra visión.
– En segundo lugar las varillas de las gafas no deben quedar ni muy apretadas ni muy sueltas, ya que si estas están apretadas causaran molestias al poco tiempo de usarlas y si están demasiado sueltas se correrá el riesgo de que estas caigan al suelo tras un movimiento brusco o inclemencia del terreno. Por ello os aconsejamos el uso de gafas con varillas terminadas o recubiertas de goma o inyectado blando y flexible, de este modo las gafas se ajustarán mejor y no ejercerán presión en la cabeza.
– En tercer lugar deben ser unas gafas ligeras, cuyo puente nasal se amolde perfectamente a la nariz, con el fin de que transcurridas unas horas sobre la bicicleta la nariz no se resienta de soportar el peso de la lente.
¿Qué tinte de cristal elijo para las gafas de ciclismo?
Aunque existen infinidad de colores de lente por los que decantarse, científicamente está demostrado que los que mejor se adaptan son las lentes con tintes de color ámbar y rosa. Este tipo de color de lente aumentan la agudeza visual y además son ideales en aquellas condiciones en que la luz es escasa o inexistente. Es gracias al considerable aumento de agudeza visual y contraste por lo que se recomienda este tipo de color de lente, ya que a más agudeza visual menos tiempo de reacción ante un imprevisto, aumentando así considerablemente la seguridad.
También son aconsejables los marrones, verdes y grises que reduzcan la cantidad de entrada de luz. Estos tonos han de ser de categoría B o C, tonos no demasiado oscuros que reducen la entrada de luz pero que nos siguen aportando una buena visión aún cuando no hay demasiado sol.
Además de las lentes tintadas existe una variedad de lentes denominadas fotocromáticas, las cuales ajustan su nivel de oscuridad en función de la luz que existe en el momento. Como principal inconveniente de estas lentes según se puede leer en algunas comparativas realizadas es que presentan la lenta reacción a la hora de pasar de oscurecerse o volverse más claras en función de la luz, aunque si bien mi experiencia con este tipo de lente es totalmente satisfactoria, usándolas en todo tipo de ambientes de luminosidad, incluido de noche.
Las lentes fotocromáticas actuales de gafas de gama media-alta distan mucho de las lentes de hace unos años, estas lentes oscurecen y aclaran rápidamente y son capaces de ajustar el color dependiendo de la cantidad de luz presente.
Otra de las opciones para no fallar a la hora de elegir el tinte de la lente de nuestras gafas de ciclismo es la de comprar unas gafas cuyas lentes sean intercambiables, es decir, la montura de las gafas va acompañada de diversos juegos de lentes con distintos tipos de tintes que se pueden montar o desmontar en función de la ruta o las condiciones atmosféricas de ese día.
Por supuesto todas las lentes de las gafas que usemos para la práctica del ciclismo, ya sean específicas para ello o no, han de ser de materiales irrompibles tales como lentes orgánicas o de policarbonato.
¿Cómo graduar las gafas de ciclismo?
¿Y si necesito graduación en las gafas y no voy cómodo o no puedo usar lentillas?
Como ya hemos hablado en artículos anteriores el sector del ciclismo es un sector en constante crecimiento, y por ello cada vez son más las empresas que se interesan por sacar productos al mercado que cubran las necesidades de los usuarios, como es el caso de Shimano, que lanza al mercado un clip óptico el cual se denomina Shimano RX que se instala en el puente nasal de las gafas y muy cerca de las lentes, permitiendo un ajuste y visión perfectos.
El precio de este clip ronda los 16 euros y no incluye los cristales, por lo que una vez se ha adquirido el clip hay que acudir a un centro óptico especializado con el fin de que monten cristales con la adecuada graduación y el correcto enfoque de acuerdo con la actividad que se va a realizar, ya que la posición del ojo no es la misma cuando se esta montado en la bicicleta y mirando al frente que cuando se esta únicamente de pie. El clip Shimano RX es compatible con los modelos de gafa Shimano S70X, S60X, S50X, Equinox, Equinox2, S50R, S40R y S20R.
Pedro J. Maldonado
www.bikepolis.com, especialistas en accesorios para bicicletas y cubiertas mtb
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