Comienza un nuevo día, pero no un día cualquiera, comienza uno de esos días como a ti te gustan, sobre la bicicleta… Mientras, dibujas en tu mente la ruta del día y, como si de un gladiador se tratase realizas tu proceso de armamiento, colocándote esas prendas y accesorios que tienen la gloriosa virtud de transmitirle a tu cuerpo que algo bueno se avecina. Sales a la calle, los rayos del sol se estampan contra tu piel y, con las primeras pedaladas, se van quedando atrás los problemas y quebraderos de cabeza de la rutina diaria. Ahora es tu momento, es el momento de sacar toda la ira y estrés acumulado a través de tus piernas y exprimirte sobre la bicicleta. Por fin llegas a tu objetivo, te das cuenta que lo has hecho más rápido y con más facilidad que la última vez, y por ello vuelves a casa con usa sensación de felicidad que hace que tu traje de piel humana se quede pequeño.
Seguro que esta historia te suena, seguro la has vivido alguna vez y seguro estoy que alguna vez no has terminado de aparcar la bicicleta cuando ya estás pensando en volver a subirte otra vez, pero no todo es bienestar, algo más se produce en tu organismo cuando montas en bicicleta, y es ese algo es de lo que vamos a hablar en el presente artículo.
Los beneficios del ciclismo son inacabables, siempre y cuando se combinen con unos hábitos de vida y alimentación saludables, y se realicen además los descansos oportunos y adecuados, ya que ninguna actividad física llevada al extremismo termina siendo saludable para el organismo.
Como principal beneficio de la práctica de ciclismo hablaremos de ese bienestar que mencionábamos anteriormente, esto se debe a que el cerebro se oxigena más y te permite pensar con más facilidad. Tu cuerpo segrega hormonas que te hacen sentir mejor y que pueden hasta llegar a ser adictivas, una saludable adicción a los grandes beneficios de montar en bicicleta.
Además está comprobado que los que practican ciclismo regularmente sufren menos enfermedades psicológicas y depresiones. Montar en bicicleta es uno de los mejores antidepresivos que existen, ya no sólo por el bienestar físico que se obtiene, sino porque además, sin apenas darse cuenta, se conoce a gente que comparte la misma afición que tú, lo que te lleva a encontrar en el ciclismo la válvula de escape perfecta.
Otro de los grandes beneficios de practicar ciclismo se refleja considerablemente en tu sistema cardiovascular, ya que al montar en bicicleta al menos dos veces por semana, se reducirá el riesgo de sufrir un infarto hasta en un 50 %. Esto se debe a que al montar en bicicleta el ritmo cardíaco máximo aumenta y la presión arterial disminuye, por lo que el corazón trabaja más economizado. Por otro lado se reducirá el colesterol, y tus vasos sanguíneos tendrán muchas menos posibilidades de obstruirse.
La salud articular es el otro de los grandes beneficios de la práctica de ciclismo. Las rodillas se ven sometidas a un trabajo mucho menos agresivo que en otros ejercicios o deportes como la carrera o el fútbol. El peso del cuerpo gravita sobre el sillín y no sobre las rodillas, además de que estas realizan una actividad constante sin bruscos cambios de ritmo. Nuestra espalda será otro de los grandes beneficiados de la práctica del ciclismo, ya que al montar en bicicleta, una vez realizado un óptimo ajuste de posición, la musculatura de la espalda está bajo tensión y se ve obligada a estabilizar el tronco. Muchos dolores de espalda provienen de la inactividad, que hace que se reduzca la nutrición de los discos intervertebrales y de esta forma van perdiendo su capacidad de amortiguar los impactos, por ello al montar en bicicleta activamos la circulación encargada de regar con nutrientes los discos vertebrales.
Otro de los incalculables beneficios de la práctica del ciclismo está relacionado con la prevención del cáncer, ya que al montar en bicicleta se le está dando un impulso a la potencia con la que el sistema inmunológico defiende nuestro cuerpo.
Los fagocitos, que son las células encargadas de devorar bacterias en nuestro organismo, se activan gracias a la acción que produce en nuestro organismo la actividad física sobre la bicicleta, devorando así todo tipo de bacterias. Esta es la razón por la que a los enfermos de cáncer y SIDA se les recomienda ir en bicicleta.
Aunque son cientos más, aquí se encuentran algunos de los principales beneficios de montar en bicicleta, por lo que si ya lo haces, desde Bikepolis te ofrecemos unas cuantas razones más por las que pedalear en busca de una salud ciclista de hierro.
Pedro J. Maldonado
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